top of page

Tiempo de sensatez

     Foucault, quien inventara una nueva Filosofía con su arqueología del saber, fue capaz de romper con toda la estructura tradicional del pensar hasta ese entonces. Y Althusser, siguiendo a Foucault, crea una nueva materia llamada "Sujetos Sujetados''. Es que en Filosofía, no se pueden inventar ideas nuevas todos los días, pero si se puede defender desde este campo, la gran tesis de la experiencia de vida. El primero que se ocupó por la salud en el pensar fue Foucault estudiando la locura lejos del tema tradicional del Ser que tanto ocuparan a Heidegger y Parménides. Hoy en día se torna casi una necesidad básica buscar la calidad del saber como la calidad de vida. Justamente, la calidad de vida, viene de la capacidad profunda del ser humano para poder reflexionar sobre su realidad. Conjugar Ser y Salud. Iniciar una nueva era: "la era de la sensatez''. Y, siguiendo a Althusser: ¿Cuándo somos entonces sujetos sujetados? Lo somos cuando huimos de nuestros problemas en vez de afrontar la verdad.

 

     Precisamente, los libros de historias de vida, de experiencias vividas, o los libros de autoayuda de sanación interior, son los que hoy en día, nos permiten ver que no todo es negativo, sino que se puede salir del vaciamiento de la angustia, desde nosotros mismos. Construyen calidad de vida a la calidad racional. Cuando la razón humana empieza a describir el mundo, se instaló la noción de sujeto, y desde allí se empezó a perfilar la razón de omnipotencia como dominadora de todo. Actualmente, el hombre mismo descubre que la vida está impregnada de misterios, que las incertidumbres lo desconciertan, que las experiencias de vidas en vez de emanciparlo, lo sujetan enajenándolo, y que la razón ya no es superpoderosa. El sujeto, envuelto de crisis, ya no está seguro de sí mismo. Vive mal. El sujeto no se halla emancipado, sino cada vez más sujetado.

 

     Pero, ¿cuándo podemos dejar de ser sujetos sujetados? Lo podemos lograr desde nuestra propia experiencia de vida, cultivando nuestra riqueza interior, proyectando cosas y buscando ayuda. La salida a nuestro narcisismo exterior es un camino, para lograr la cura interior, capaz de hacernos seres humanos libres, ya no sujetados. El priorizar la salud corporal como espiritual es un camino de experiencia curativa sana y saludable. Es buscar la empatía con el otro para ayudarlo a salir del pozo. Y, la pandemia, de la soledad, desgano, bronca y desilusión que enferman al mundo, nos alejan de la capacidad de salud que se necesita hoy con sólo recuperar la frase: "Todo pasa, todo se puede'' "Siento, luego existo''.

 

     ¿Cuándo dejamos de ser sujetos sujetados entonces? Cuando tenemos "resiliencia'' ¿Qué es pues la resiliencia? Es la capacidad que todos tenemos para afrontar situaciones traumáticas. Todos somos potencialmente resilientes, y el hacer introspección, nos permite hacernos cargo de los que nos está pasando. Y, a partir de ahí conectarnos con una contención afectiva, para poder empezar a ver esa luz al final del túnel. 

 

     ¿Cuándo somos resilientes? Las palabras del periodista, autor del segundo libro sobre resiliencia Alejandro Gorenstein que lo presentara hace poco en la Patagonia, resultan un ejemplo concreto: "Me interesa mucho la historia de gente común, de que tengan un mensaje que todo se puede, que se puede cumplir un sueño. Las historias que escribo no son las de superhéroes, sino las de sujetos concretos que pasaron por situaciones adversas para poder transformar esos momentos traumáticos en algo positivo, y con esa experiencia, poder ayudar a otros''. Es que el sujeto del capitalismo salvaje actual, no resulta un sujeto resiliente, sino un sujeto enajenado, cuando para lograr cosas superficiales exteriores, ignora sus profundidades interiores.

 

Fuente: Diego Romero - Periodista, filósofo y escritor. www.diariodelcuyo.com.ar

 

bottom of page